Según los datos del Instituto Nacional de Estadística, en el año 2023, hubo 76.685 divorcios. De ellos, el 14,9% lo fueron ante notario. Así mismo, la custodia compartida fue otorgada en el 48,4% de los casos de divorcio de parejas con hijos, 2,9 puntos más que el
año anterior.

El 32,0% de los divorcios se produjeron después de 20 años de matrimonio o más. El 21,4% entre cinco y nueve años después, el 16,7% entre 10 y 14 años, el 15,7% entre 15 y 19 años, el 10,8% entre dos y cuatro años y el 3,3% en menos de dos años.

El mayor número de divorcios entre cónyuges de diferente sexo tuvo lugar en la franja de edad entre 40 y 49 años, tanto en hombres como en mujeres. La edad media de las mujeres en los procedimientos de divorcio fue de 46,2 años. En los hombres fue de 48,7 años.
Partiendo de los datos estadísticos, lo cierto es que muchos ciudadanos se plantean divorciarse después de las vacaciones, fechas en las que los despachos de abogados notamos un incremento de consultas en este sentido.

Ello suele ser debido a varios factores como una mayor convivencia de las parejas que dejan su rutina y permanecen más tiempo juntos, lo que suele magnificar problemas preexistentes que no han sido solucionados; tiempo para la introspección por lo que se plantean si quieren continuar en la misma situación o realizar un cambio en sus vidas independientemente de la pareja; cambio en las dinámicas diarias lo que supone un mayor desgaste de la convivencia; desacuerdo en cómo disfrutar de las vacaciones, surgiendo discrepancias en los destinos de viaje y si un miembro de la pareja cede a los deseos del otro, si el viaje no cumple las expectativas esperadas, reproches por ello… ;falta de comunicación a pesar de permanecer más tiempo juntos…

Si te encuentras en esta situación, el primer paso siempre es consultar a un despacho de abogados especializado en familia para conocer cuáles son los pasos a seguir, siendo la separación y el divorcio de mutuo acuerdo lo que supone un menor desgaste emocional para la pareja y los hijos, si los hubiera. En nuestra legislación, a día de hoy, no es requisito alegar ningún motivo para proceder al divorcio, siendo el único requisito que haya transcurrido al menos tres meses desde que se celebró el matrimonio.

El divorcio de mutuo acuerdo se puede tramitar vía notarial o judicial, dependiendo de las circunstancias que concurran en el caso concreto. En cualquiera de los supuestos, somos los abogados quienes redactamos el documento denominado convenio regulador
del divorcio que habrá que presentar ante la Notaría o junto a la demanda en la vía judicial.

Para poder tramitar el divorcio notarial es imprescindible que los cónyuges no tengan hijos menores o mayores que necesiten apoyo económico familiar al no contar con medios económicos propios, siendo la Notaría competente la del último domicilio común de los cónyuges, o el del lugar en el que tenga su residencia habitual cualquiera de ellos.

Si existen hijos menores o mayores de edad no emancipados o independientes económicamente, el Convenio Regulador del Divorcio, en el cual se regulan las medidas al respecto cuales son: el fin de la convivencia, atribución, en su caso, del uso y disfrute de la vivienda familiar, guarda y custodia de los hijos, que puede ser monoparental o custodia compartida; pensión de alimentos, pensión compensatoria, si hubiera derecho a ella…., se debe presentar en el Juzgado junto con la correspondiente demanda.

Una vez admitida a trámite la demanda, el Juzgado, a través del procurador, citará a los cónyuges para la ratificación del convenio. Al existir hijos en común, se dará traslado de la demanda y del convenio regulador del divorcio, al Ministerio Fiscal. Si éste también muestra conformidad con el contenido del convenio al considerarlo ajustado a la legalidad y sin que concurra ninguna cláusula que perjudique a los hijos, se decretará la disolución del vínculo matrimonial por divorcio y se aprobará el convenio regulador, quedando a
partir de ese momento, los cónyuges divorciados.

En el supuesto que la pareja no llegue a acuerdo amistoso, el divorcio se tramitará de modo contencioso, por medio del cual, uno de los cónyuges interpondrá demanda de divorcio contra el otro y cada uno será representado por sus correspondientes abogados y procuradores.

En el caso que la pareja no estuviera casada, pero tenga hijos menores o mayores no independientes económicamente en común, se presentará en el Juzgado demanda de guarda, custodia y alimentos que también puede tramitarse de mutuo acuerdo o de modo
contencioso.